La vicepresidenta del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha presumido en la Asamblea General de Naciones Unidas de las soluciones de la economía social en las que se ha enfocado el Gobierno de España, que «han demostrado que es posible superar un sistema económico despiadado».Así se ha expresado Díaz en la adopción de la primera resolución de la Asamblea de la ONU sobre economía social y solidaria, que, según ha apuntado, impulsa la democracia y la justicia social como ejes vertebradores del mundo «que se aspira a construir».
Según ha expuesto, las soluciones en las que ha profundizado el Gobierno han posibilitado superar un sistema económico «sin alma, que se funda en los recortes, el olvido de las personas más vulnerables que está anclado en la desigualdad».
Además, ha insistido en que la economía social ha logrado «desmentir el interesado tópico de que el desarrollo económico de un país debe sacrificar, inevitablemente, unos ideales de justicia e igualdad que, muy al contrario, deben estar en el núcleo de nuestros sistemas políticos y económicos». «Las cosas, lo hemos comprobado, pueden hacerse de otra manera», ha subrayado.
Al respecto, ha apuntado que la economía social representa el 10 por ciento del Producto Interior Bruto de España, un tejido empresarial «sólido, preparado para los cambios», insistiendo al tiempo en que el papel de dicha economía es «decisivo en la transformación de la economía mundial hacia un modelo de desarrollo sostenible».
En este punto se ha referido también a la economía social como instauradora de igualdad, recalcando que es también feminista y que reduce brechas salariales poniendo como ejemplo España, donde ha apuntado que la brecha entre hombres y mujeres es ocho puntos menores que en la media de la economía española.
Es la primera resolución aprobada por la Asamblea General de la ONU a favor del modelo empresarial de economía social. Este texto “alienta” a los Estados miembros a que promuevan y apliquen estrategias, políticas y programas nacionales, locales y regionales “para apoyar y potenciar la economía social y solidaria como posible modelo de desarrollo económico y social sostenible”.
La iniciativa de esta resolución, denominada ‘Promover la economía social y solidaria para el desarrollo sostenible’ fue impulsada y liderada desde hace dos años en el seno de la Asamblea General de Naciones Unidas por el Gobierno de España, con el apoyo de la OIT (Organización Internacional del Trabajo), la UNCTAD (Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo) y el Grupo de Trabajo Interinstitucional de las Naciones Unidas sobre Economía Social y Solidaria, y contó con la colaboración de la Confederación Empresarial Española de la Economía Social (CEPES).
La propuesta de España de lanzar esta Resolución fue apoyada en Naciones Unidas por los gobiernos de Bélgica, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Eslovenia, Francia, Guinea Ecuatorial, Hungría, Italia, Luxemburgo, Marruecos, República Dominicana y Senegal.
Además, la resolución anima a los países a avanzar en políticas para este modelo a través de marcos jurídicos específicos; dar visibilidad a su contribución a través de los sistemas estadísticos nacionales; ofrecer incentivos fiscales y de contratación pública; reconocer su papel en los programas educativos y las iniciativas de desarrollo de capacidades e investigación; reforzar el espíritu empresarial y el apoyo a estas empresas, en particular mediante un mayor acceso de estas entidades a los servicios financieros y a la financiación; así como a la participación de los agentes de este modelo empresarial en el proceso de elaboración de las políticas.