La Asamblea General de Naciones Unidas (ONU) en Nueva York ha dado luz verde a la segunda resolución sobre Economía Social, que ha sido impulsada por vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz. «La Economía Social es una herramienta efectiva para abordar problemas estructurales como la desigualdad, el cambio climático y la exclusión social», ha asegurado la ministra tras conocer la aprobación de la resolución, que ha contado de nuevo en el proceso con el apoyo de Chile y Senegal, naciones que ya impulsaron la primera resolución de la ONU sobre Economía Social en 2022.
Díaz ha manifestado además su compromiso con la expansión a nivel internacional de esta forma de entender la economía que promueve un tejido productivo más resiliente a las crisis y que redistribuye de forma más equitativa la riqueza.
En esta segunda resolución refuerza la conexión entre la Economía Social y Solidaria y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 y reitera la petición de toma de consideración de entidades de la Economía Social en la formulación e implementación de políticas públicas.
Asimismo, se incluye el trabajo decente como idea fuerza a promover desde la Economía Social, un modelo económico que fomenta la inclusión social, la adopción de decisiones de forma democrática, que estimula la cohesión social, combate la despoblación rural, promueve la innovación social y el desarrollo económico sostenible. Tan sólo en Europa la Economía Social cuenta con 4,3 millones de empresas y entidades, 11,5 millones de empleados remunerados y factura más de 912.000 millones de euros, según un estudio recientemente publicado por la Unión Europea (UE).
«La resolución hace también un llamamiento a una mayor consulta con los actores de la economía social y solidaria en la elaboración de las políticas públicas, como hacemos ya desde el Gobierno de España, o anima a los Estados a cooperar regional y bilateralmente, como hemos hecho con la nueva Red Iberoamericana de Economía Social o los distintos memorandos de colaboración bilateral», ha explicado la vicepresidenta.
El Ministerio de Trabajo y Economía Social ha liderado la internacionalización de este ecosistema económico con la creación de la Red Iberoamericana de Economía Social, un proyecto para potenciar su desarrollo que ha sido ideado junto con Brasil, Colombia, Chile y México y al que se han incorporado Costa Rica, Paraguay, Honduras o República Dominicana.
Asimismo, durante la presidencia española del Consejo de la Unión Europea se priorizó la Economía Social y se logró la adopción de la primera Recomendación de la UE en Economía Social.
«El compromiso con hacer prosperar la Economía Social sigue avanzando con alianzas sólidas. Seguiremos liderando ese esfuerzo para lograr una sociedad más justa y con menos desigualdades», ha asegurado la vicepresidenta. Naciones Unidas volverá a abordar este tema en dos años y adoptará una nueva resolución al respecto.